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La culpa y la vergüenza
Las personas del colectivo LGTBIQ+ crecen con heridas emocionales, debidas a aparición de numerosas fuentes de estrés a lo largo de su vida. Entre ellas, destacan el bullying LGTBIfóbico, la falta de apoyo familiar y/o social o la LGTBIfobia interiorizada. Estas situaciones generan ansiedad y depresión desde etapas evolutivas iniciales, como la niñez o la adolescencia, y provocan dificultades en el aprendizaje de la gestión de las emociones.
Entre las emociones desagradables más frecuentes en las personas LGTBIQ+ destacan la culpa y la vergüenza. Estas dos emociones pueden estar presentes en gran parte de sus vidas, condicionando sus conductas, sus decisiones y sus relaciones con los demás.
La culpa y la vergüenza son emociones complejas y, en el caso de la población LGTBIQ+, tienen un origen multifacético. Muchas personas dentro de este colectivo han experimentado sentimientos de imperfección y de inadecuación, miedo al rechazo y bajo sentido de pertenencia al grupo.
Estas emociones tienen su origen en varios aspectos que vamos a comentar:
1. Estigmatización y discriminación:
La historia del colectivo LGTBIQ+ ha estado marcada por la discriminación y el estigma social. Durante distintos momentos históricos se nos ha visto como pecadores (por parte de la Iglesia Católica), como enfermos (a través de la medicina, la psiquiatría y la psicología) o como delincuentes (Ley de Vagos y Maleantes y Ley de Peligrosidad Social). Esto puede generar sentimientos de culpa y vergüenza en las personas que se identifican como parte de este colectivo, ya que pueden haber sido enseñadas a percibir su identidad como algo "anormal" o "incorrecto"
2. Autoaceptación:
La lucha por la autoaceptación de la identidad afectivo-sexual o de género es un proceso común para muchas personas LGTBIQ+. A menudo, el conflicto interno acerca de su identidad puede llevar a sentir vergüenza, especialmente en entornos donde la diversidad sexual no es bien recibida.
3. Familia y comunidad:
Los valores familiares y culturales también juegan un papel crucial. En muchas culturas, las expectativas sobre la sexualidad de la identidad de género pueden ser restrictivas y muy marcadas por los dictados del cis heteropatriarcado, lo que lleva a sentimientos de vergüenza al no cumplir con esas expectativas.
4. Falta de referentes adecuados:
La forma en que los medios de comunicación representan a las personas LGTBIQ+ puede influir en cómo se perciben ellas a sí mismas. Una representación negativa o estereotipada puede perpetuar la homofobia interiorizada, la culpa, la vergüenza y la auto estigmatización.
5. El proceso de salir del armario:
Para muchas personas LGTBIQ+, el acto de visibilizarse y ser abiertamente quienes son puede ser una fuente tanto de liberación como de miedo y vergüenza. El temor al rechazo o a la desaprobación puede generar un gran peso emocional.
6. Falta de apoyo social:
La ausencia de redes de apoyo, tanto familiares como sociales, puede intensificar estos sentimientos. Las personas que no cuentan con un entorno comprensivo y acogedor pueden sentir más intensamente la vergüenza y el aislamiento. Aquí es muy importante el apoyo de la familia, ya que todas las investigaciones sitúan el apoyo familiar como el principal factor de protección ante problemas de salud mental.
No obstante, es importante destacar que el colectivo LGTBIQ+ también ha trabajado y continúa trabajando en la lucha contra la vergüenza. Muchos abogan por la aceptación y el reconocimiento de la diversidad sexual, promoviendo la autoaceptación y la visibilidad. Movimientos como el orgullo LGTBIQ+ buscan empoderar a las personas y celebrar la diversidad, desafiando las narrativas de vergüenza y promocionando la aceptación.
En conclusión, aunque la culpa y la vergüenza pueden ser vivencias comunes en el colectivo LGTBIQ+ debido a diversos factores socio-culturales, hay un movimiento creciente hacia la aceptación, el orgullo y la celebración de las identidades diversas.
En este sentido, es esencial seguir promoviendo un ambiente inclusivo y de apoyo para ayudar a mitigar estas emociones desagradables. Si tu formas parte del colectivo y te sientes así, te podemos ayudar, acompañándote en tu proceso de autoafirmación y de descubrimiento de tu yo más auténtico. EN IAN DE PSIQUE, RUMBO HACIA TU BIENESTAR.
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